Lo de este Huracán de la mano de Gustavo Alfaro da gusto. No tanto por un juego vistoso y acostumbrado al paladar quemero pero sí por su eficacia y por los logros obtenidos, tan sólo en esta Superliga lleva 7 triunfos en 8 partidos, tres triunfos consecutivos y 11 partidos invictos como local, lo que lo deja a 6 puntos de Racing y con un partido menos.
Con un buen partido de Toranzo que estuvo de entrada, el Globo dominó desde el arranque todo el partido ante un deslucido Godoy Cruz. Aprovechó la velocidad de Gamba y Briasco en las puntas y la eficacia de Chávez, que de cabeza, logró poner el primero cuando iba media hora de juego.
Enseguida, el penal evidente que recibió Norberto Briasco y el tanto convertido desde los doce pasos por Lucas Gamba que otra vez, volvió a convertirse en figura y en este caso con el beneficio de que sus compañeros de ataque también estuvieron en gran nivel.
Sobre el final fue el debut de Casco, uno de los jóvenes del Globo que Alfaro comienza a foguear para la segunda etapa de la Superliga que será en medio de la doble competencia por la Libertadores 2019. No llena los ojos pero llena el corazón este Huracán, hay ilusión.